Beskrivelse
Pasos pesados originalsprog spansk roman
Pasos pesados originalsprog spansk roman: Pasos Pesados es la historia de un joven limeño que deja atrás la adolescencia para adentrarse en la incertidumbre y los pesares de la vida adulta.
Este libro es una secuencia rebosante de bares, aventuras, encuentros, desapariciones, seducciones, amistades y fugas.
También la historia de un autoaprendizaje impuesto salvajemente por un país sumido en una gran violencia, una violencia múltiple: el terrorismo, la represión policial y la corrupción política en el Perú de finales de la década de los ochentas.
Sobre el libro Pasos pesados originalsprog spansk roman
Novela
Empiece a leer el libro:
«En Lima to be or not to be significan la misma cosa», le había dicho Ana en su último encuentro.
Ahora, tenía las manos en la cintura, observaba cómo la boya dispersa peleaba con las olas del mar y pensó en la vida misma, en los instantes, en esa porción brevísima del tiempo.
«Esa lucha», musitó para sí mismo.
La brisa que soplaba su mar limeño se estrellaba en su rostro y formaba pequeñas crestas en su cabello.
Colocó sus brazos sobre el muro, apoyó su cuerpo contra el malecón y se quedó viendo el vaivén de las olas y la boya. Le pareció una danza dulce.
Al cabo de poco, unas manos le cubrieron los ojos y una voz que contenía una risa preguntó: «¿Adivina quién soy?».
Tiago Molina sintió la combustión de esas manos, como si acabaran de salir de unos bolsillos de pana.
—Una persona con alzhéimer.
—Equivocado.
—Alguien que no sabe quién es.
—No.
—Si fuese adivino no estaría aquí, Ana. Estaría viajando en un crucero.
—Equivocado otra vez. Estarías en un circo adivinando el futuro de las personas.
Cuando ella soltó sus manos, la boya había desaparecido de su vista y la niebla empezaba a cubrir lenta y silenciosamente el agua marina.
—¿Qué te trae por mi barrio tan temprano? —preguntó Ana—. ¿No deberías estar en el café trabajando?
—Mañana debo entregar el último ensayo al Gato. Me he tomado el día libre.
El Gato era el profesor del curso U214.
Lo llamaban así por sus ojos chispeantes y verdes y su adicción al jurel encebollado.
Contrariamente al resto de los catedráticos, el Gato no afirmaba ninguna idea sin antes haberla corroborado al menos tres veces.
Cuando exponía sus asignaturas en clase, lo hacía con tanta rigurosidad como si en vez de estudiantes universitarios estuviese dirigiéndose a un selecto grupo de eruditos de la lingüística o a miembros de la Real Academia Española.
—No te mereces tanta cortesía por parte del Gato; eres un mal estudiante, un mal adivino.
—Él comprende mi situación. No es fácil trabajar y estudiar al mismo tiempo.
Seguir leyendo
—He oído que te regaló dos libros, ¿es cierto eso?
—Sí, el semestre pasado me dio El capital de Marx y unos cuentos de Borges.
—Es una contradicción.
—¿Qué hay de contradictorio? —preguntó Tiago alzando los hombros.
—Marx era comunista y Borges era fascista.
—No, Borges nunca fue fascista; recuerdo había dicho que era anarquista. Estaba en contra de cualquier tipo de gobierno, más aún si eran dictaduras.
—Borges es un fascista con talento. Ojalá todos los fascistas fueran como él… ciegos.
Sabía que la única persona que podía salvarlo era Ana.
Si no entregaba el ensayo a la mañana siguiente, corría el riesgo de no aprobar el curso.
Una discusión con ella por culpa de Borges lo podía llevar a perder el año académico.
Decidió quedarse callado y Ana interpretó ese silencio como una aceptación de sus ideas sobre Borges.
—¿Qué decías entonces? —dijo Ana tratando de molestarlo, incitándolo a debatir.
—No he venido a discutir sobre Borges.
—Ya sé, has venido para que arregle la vida académica como de costumbre. ¿Qué tema has elegido?
—Lingüística textual.
—La lingüística del texto surge a partir de reconsiderar la naturaleza de la lengua, cuya base principal radica en que la lengua no termina con la unidad que constituye la frase… —dijo Ana imitando la voz solemne del Gato.
Mobile Pay 34512
Flete incluído sólo para Dinamarca. Para compras fuera de Dinamarca por favor contactarnos en info@auroraboreal.dk
Para nuestros lectores en español también pulse aquí